Tomates al horno con ricotta y orégano

Los tomates al horno con ricotta y orégano son una receta deliciosa y fácil de preparar, ideal para cualquier ocasión. Este plato combina la dulzura natural de los tomates asados con la suavidad del queso ricotta y el toque aromático del orégano. Con ingredientes simples y pasos claros, podrás disfrutar de una experiencia culinaria mediterránea sin complicaciones.

Ingredientes

Para esta receta necesitarás los siguientes ingredientes:

• 6 tomates maduros de tamaño mediano
• 200 g de queso ricotta
• 2 cucharadas de orégano seco
• 3 cucharadas de aceite de oliva
• Sal y pimienta al gusto
• Hojas frescas de albahaca para decorar (opcional)

Preparación

Paso 1: Preparar los tomates

1. Lava bien los tomates bajo agua fría y sécalos suavemente.
2. Con cuidado, corta la parte superior de cada tomate para formar una tapa y retira la pulpa con una cuchara pequeña. Reserva las tapas para más tarde.
3. Coloca los tomates vacíos en una bandeja apta para horno ligeramente engrasada con aceite de oliva.

Paso 2: Preparar el relleno

1. En un bol mediano, mezcla el queso ricotta con una cucharada de orégano seco.
2. Añade una pizca de sal y pimienta al gusto y mezcla bien hasta obtener una textura cremosa.

Paso 3: Rellenar los tomates

1. Con una cuchara, rellena los tomates con la mezcla de ricotta, asegurándote de no sobrellenarlos para evitar que se desborden durante la cocción.
2. Coloca las tapas reservadas sobre los tomates como una cubierta decorativa.

Paso 4: Hornear

1. Precalienta el horno a 180°C (350°F).
2. Rocía un poco de aceite de oliva sobre los tomates rellenos y espolvorea la cucharada restante de orégano seco.
3. Hornea los tomates durante 25-30 minutos o hasta que estén tiernos y ligeramente dorados en la superficie.

Presentación

1. Retira los tomates del horno y deja que se enfríen durante unos minutos antes de servir.
2. Decora con hojas frescas de albahaca si lo deseas y acompaña con pan tostado o una ensalada ligera.

Consejos útiles

• Puedes sustituir el queso ricotta por requesón si prefieres una textura más granulada.
• Para un toque más aromático, puedes añadir una pizca de tomillo o albahaca seca al relleno.
• Este plato se sirve mejor caliente, pero también es delicioso a temperatura ambiente.

Variaciones y adaptaciones de la receta

Una de las maravillas de los tomates al horno con ricotta y orégano es su versatilidad. Aunque la receta básica es deliciosa tal como está, existen múltiples maneras de personalizarla según tus preferencias o los ingredientes que tengas a mano. Aquí te compartimos algunas ideas para experimentar y hacer de esta receta algo único cada vez que la prepares.

Agregados para el relleno

• Espinacas frescas o congeladas: Pica espinacas y mézclalas con el queso ricotta antes de rellenar los tomates. Esto añadirá un toque de frescura y un contraste de color que hará el plato aún más atractivo.
• Champiñones picados: Saltea champiñones en un poco de aceite de oliva y agrégalos a la mezcla de ricotta. Este ingrediente aportará un sabor terroso que combina perfectamente con los tomates y el orégano.
• Pan rallado y queso parmesano: Si prefieres un relleno con una textura más crujiente, mezcla un poco de pan rallado y parmesano con la ricotta antes de rellenar los tomates. También puedes espolvorear esta mezcla por encima antes de hornear para formar una costra dorada y sabrosa.

Alternativas de hierbas aromáticas

Aunque el orégano es el ingrediente clásico en esta receta, puedes experimentar con otras hierbas para variar el sabor:

• Albahaca fresca: Pica hojas de albahaca y agrégalas al relleno para un sabor más dulce y fragante.
• Romero: Unas hojas finamente picadas de romero añadirán un toque robusto y cálido.
• Perejil fresco: Úsalo para decorar el plato al final o mézclalo en el relleno para un sabor más fresco y ligero.

Tomates y otros vegetales como base

Si deseas salir un poco de lo tradicional, prueba esta receta con otros vegetales:

• Calabacines: Corta calabacines por la mitad, retira parte de la pulpa, y rellénalos con la mezcla de ricotta y orégano antes de hornearlos.
• Pimientos: Los pimientos pequeños o medianos son perfectos para esta receta. Su dulzura natural al asarse combina bien con el queso.

Cómo acompañar los tomates al horno

Este plato se disfruta al máximo cuando se sirve con acompañamientos que complementen sus sabores mediterráneos:

• Pan rústico tostado: Perfecto para recoger el jugo de los tomates y el queso que se desprenden durante la cocción.
• Ensalada fresca: Una mezcla de hojas verdes, pepino y una vinagreta ligera hará un contraste fresco con el plato caliente.
• Cuscús o quinoa: Si prefieres un acompañamiento más sustancioso, estas opciones son ideales para absorber los jugos del plato.

Conservación y reutilización

Si te sobran tomates al horno, no te preocupes:

• Almacenamiento: Guarda los tomates en un recipiente hermético en el refrigerador durante un máximo de dos días. Antes de servirlos nuevamente, puedes calentarlos en el horno o el microondas.
• Reutilización: Tritura los tomates con su relleno y utilízalos como base para una salsa para pasta. También puedes añadirlos a una sopa de verduras para un sabor extra.

Los tomates al horno con ricotta y orégano son un ejemplo perfecto de cómo los ingredientes sencillos pueden transformarse en un plato exquisito. Este manjar es ideal tanto para una comida informal como para una cena especial. ¡Anímate a probarlo y sorprende a tus seres queridos con su sabor y aroma!